El Exquis es un hotel surrealista. Uno de los principios básicos del movimiento surrealista es estar disponible al azar, para permanecer abierto a lo inesperado. Esta naturalidad en el proceso creativo era lo que buscábamos para la decoración del hotel.
La presencia de las obras de arte colectivas en todas las habitaciones nos sumerge en un mundo artístico, donde el misterio es omnipresente. El destino le dará la posibilidad de conocer personajes fantásticos nacidos en la imaginación de ocho artistas.
La obras de arte se han creado siguiendo el concepto del «Cadáver exquisito», un juego de mesa inventado en 1925 que puede utilizar palabras o imágenes. En caso de que se utilicen imágenes, un jugador dibuja una cabeza y dobla el papel para que el segundo jugador no pueda ver el dibujo, etc. Al final, resulta un personaje o criatura extraño. Los jugadores no saben qué se ha dibujado antes de que llegue su turno. De esta manera, el cuerpo «híbrido» resultante es producto del azar.
Los surrealistas exploraron los mercadillos de Saint-Queen buscando gangas. Los objetos que aparecen en las obras de arte tienen alma: objetos problemáticos, objetos integrados, objetos fantasma, objetos de ensueño, máquinas ópticas, poemas objeto, objetos con una función simbólica... Siguiendo la dirección de los hallazgos fortuitos, fuimos a buscar muebles a ese mismo sitio.
No se sorprenda cuando encuentre una mesa máquina de coser debajo de un conejo rojo en su habitación...